El análisis de BNEF muestra que la inversión total en energía baja en carbono deberá superar con creces la inversión en combustibles fósiles si el mundo quiere lograr cero emisiones netas en 2050. Usando siete escenarios climáticos de la Agencia Internacional de Energía, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático y Financial System Greening Network, BNEF calcula que la inversión en suministro de bajas emisiones de carbono tendría que ser al menos cuatro veces mayor que los combustibles fósiles si se alcanzara el objetivo. Sin embargo, aunque la inversión en petróleo, gas y carbón disminuirá en los próximos tres años, los combustibles fósiles seguirán desempeñando un papel en áreas que son difíciles de debilitar, especialmente en los países en desarrollo.
