La Comisión Europea aprobó un tope tarifario de 180 €/MWh, que afectará al carbón de lignito. La inclusión de este tipo de activos en el precio tope podría generar importantes ahorros de costos para los mercados con una alta presencia de lignito en la combinación de generación de energía. Bloomberg New Energy Finance, por ejemplo, estima que Alemania podría ahorrar unos 4.000 millones de euros (3.900 millones de dólares) entre diciembre de 2022 y marzo de 2023. Esto representa una caída del 8 % en el costo de la electricidad durante el período, en comparación con la ausencia de un límite de precio.